Parecía imbatible Valentino Rossi en el trazado holandés y lo fue, porque se quedó con la clasificación el viernes y hoy sábado fue inalcanzable en la punta (históricamente se corre un día antes al habitual porque el obispo de la ciudad, en 1925, les permitió realizar la carrera si no interferían en la tradicional misa del domingo).
El piloto de la Yamaha YZR-M1 mandó desde el vamos y Marc Márquez se limitó a seguirlo esperando que cometa un error. El Doctor no lo cometió y sumó su 111º triunfo en su extensa y fantástica carrera deportiva.
Las vueltas finales levantaron a los espectadores de sus asientos. Valentino consiguió un tiempo extraordinario de 1m33s673 en la penúltima vuelta, lo que le sirvió para despegarse del español. Pero éste tampoco se rindió y dio el máximo para apretar de nuevo la carrera en una última vuelta frenética. Con Rossi en el frente, Márquez se la jugó en la última chicana. Entró algo justo y esto obligó a Valentino a despistarse por la tierra, pero reingresó en la pista por delante de su rival.
Para Jorge Lorenzo fue una carrera distinta, en solitario. El mallorquín partía desde la octava plaza, pero tras una buena salida se situó quinto en la primera curva. Tras una gran primera vuelta se colocó tercero, tras superar a los hermanos Espargaró, con la vista puesta en Rossi y Márquez.
Con estos resultados, Valentino mantiene el liderazgo del campeonato con 163 unidades, diez más que Lorenzo. El próximo compromiso del Mundial será el 12 de julio en el circuito de Sachsenring, por el GP de Alemania.