Tras once meses de pelea judicial con HDSP/Grupo Izzo, representante oficial de la legendaria marca de motos norteamericana en Brasil, Harley-Davidson asumió la operación enforma directa en el país vecino.
Durante una conferencia que se realizó en el país vecino, nuestros parcerios de AutoData en Brasil adelantaron los planes de la firma en ese mercado, que incluye la construcción de una nueva planta en Manaus (AM) y por lo menos la apertura de unos 10 concesionarios propios hasta fin de año. Pero además, y teniendo en cuenta este movimiento que realizaron en Brasil, consultaron sobre lo que sucederá en el resto de los mercados de la región, incluyendo Argentina.
Luego de tomar el control, Harley-Davidson, transferirá a mediados de agosto su producción brasileña a la nueva planta que construyendo en el PIM, Polo Industrial de Manaus. La actual fábrica, que también se encuentra en la zona franca de Manaus, se desactivará.
De acuerdo con lo que explicó Celso Ganeko, director industrial, la nueva fábrica tendrá una capacidad instalada de aproximadamente unas 20.000 unidades/año, un 40% mayor a la actual.
En la actualidad, la compañía estadounidense tiene una producción marginal: en 2009 y 2010 salieron cerca de 4.000 unidades. En su mejor año, 2008, salieron 6.350 motos de la línea de montaje operando en un turno. Desde que se inauguró en 1999, se montaron en el PIM un total de 20.000 motocicletas Harley-Davidson.
Manaus ensambla la línea completa que se comercializa en el país vecino, con excepción de la nueva familia VRSC, que se sumará a la Sportster, Dyna, Softail y Touring a partir del segundo semestre.
H-D en Manaus prácticamente ensambla las motos, aunque cumpla con todos los pasos de Proceso Productivo Básico (PPB) que le otorgan el status de producción local para acceder a los beneficios fiscales. “Casi el 100% de las piezas vienen de Estados Unidos”, señaló el vice-presidente de H-D para América Latina Mark Van Genderen.
La dificultad para nacionalizar piezas, dijo el directivo, está directamente relacionada a la baja producción – la empresa actúa en un nicho que es el de las motos de lujo. “Nosotros producimos 4.000 motos por año en tanto que Honda, nuestra vecina, produce más de un millón. Yamaha, Suzuki y Dafra producen de 200.000 a 400.000 unidades. Es muy difícil conseguir un proveedor dedicado, como exigimos, con un volumen tan bajo”, se sinceró el directivo.
La propia producción global de H-D es relativamente modesta: cerraría 2011 con unas 240.000 unidades producidas, número similar al 2010 – además de la planta brasileña, hay otras tres plantas en los Estados Unidos y una pequeña operación en India, que recién se inaugura y es similar a la de Manaus.
El mejor año para la firma que se sometió a un fuerte proceso de restructuración, fue el 2007 cuando produjo a nivel global unas 300.000 unidades.
En Brasil a empresa también invertirá – sin revelar valores- en un nuevo Centro de Distribución de Piezas, que se instalará en las márgenes del Rodoanel paulista. De acuerdo a lo que explicó Longino Morawski, director de la operación nacional, la intención es reducir el tiempo de espera de la partes de reposición que ahora vienen directamente de EE.UU a San Pablo. Antes las piezas seguían para Manaus y de ahí se distribuían a toda la red.
DE ESTE LADO DE LA FRONTERA
En Brasil como te contamos, la compañía tomó la operación en forma directa luego de concluir no en buena forma su vínculo con el representante Izzo. Antes esta acción y sabiendo que nuestros pareceiros de AutoData asistirían a la conferencia, nos ayudaron con la tarea de saber como seguirá la cosa en la Argentina.
Al respecto, el vice-presidente mundial de H-D que “a mediano plazo el plan de la compañía es crecer globalmente y la tendencia es la de controlar la red en todos los mercados donde actúa”. Es decir, hoy cuentan con un socio en el país pero no descartó que en algún momento (pensando a futuro) se evalúe seguir los pasos de Brasil.