La dinastía RS comenzó hace 40 años en Alemania y alcanzó su esplendor en Europa con el lanzamiento del Escort RS1600 en 1970. Hoy un nuevo RS se presta a debutar y promete cautivar miradas y congelar cronómetros.
El nuevo Focus RS saldrá a la venta en la primera mitad de 2009 y resulta de la creación de un pequeño grupo ingenieros. El primer adelanto se verá en diez días en el Salón del automóvil de Londres: todavía puede sufrir algunas modificaciones en su aspecto exterior.
Agresivo, impactante, espectacular. Todos y cada uno de los adjetivos le caben: es un auto que no pasa desapercibido y anuncia sensaciones extremas.
El verde intenso rinde tributo al Escort MKI RS1600, el primer Ford que contó con las siglas RS -Rallye Sport- (“es una moderna interpretación del verde Le Mans de los años ‘70”, dijo el responsable de desarrollo, Jost Capito); argumentos no le faltan: 300 CV exprimidos en un motor de cinco cilindros y 2,5 litros de cilindrada (similar al del Focus ST pero mejorado) apoyados en la gestión de un turbocompresor e intercooler. El par motor máximo supera los 410 Nm. ¿Serán suficientes?
Todo en él está sobredimensionado, es un Focus al que le recetaron anabólicos en dosis extras: llantas de 18”, trochas extendidas (40 mm), guardabarros, paragolpes –con una impresionante parrilla inferior en forma trapezoide extendido-, molduras laterales… cada detalle evoca el mundo de la alta performance: las branquias laterales triangulares aportan un toque distintivo, los ojos de xenón suma una mirada felina. El Kinetic Design en su máxima expresión.
El jefe de diseño, Stefan Lamm, asegura: “Es de vital importancia que el Focus RS se vea tanto como un Focus especial, individual, distintivo, abierto en su estilo a la máxima performance. Debimos demostrar una clara progresión del Focus ST (Sport Tecnologies)”.
Por dentro, la temática racing se acentúa en detalles de tapicería negra y apliques de aluminio que enfatizan el ambiente deportivo. Los asientos deportivos, tiene detalles de costuras en colores y son muy envolventes, especialmente diseñados para brindar un excelente soporte aún en situación de manejo extremo. El centro de la consola es dominante.
Debajo del capot late la carta ganadora de la marca. En el corazón del nuevo Focus RS se encuentra una versión preparada especialmente y turbocomprimida del motor Duratec 2.5 de cinco cilindros. Se indica una aceleración de 0 a 100 km/h que derriba la barrera de los seis segundos.
Varias innovaciones fueron aplicadas como resultado de un feedback desarrollado con usuarios especialmente elegidos y permitieron a los ingenieros mantener al Focus RS como un automóvil de tracción delantera dócil de conducir, pero dispuesto a entregar emociones mayores en quien sepa llevarlo, para ello, un diferencial de resbalamiento limitado reparte la potencia de manera equitativa y sin sobresaltos.
El ESP tiene un programa de uso más “libertino” y permite, para quien se crea capacitado para tal fin, su desconexión total. En síntesis, sistemas de tracción y dirección perfectamente ajustados para aplicar toda la potencia cuando el conductor lo determine.
El nuevo RS viene equipado con un innovador sistema de suspensión frontal conocido como “Revoknuckle”, el cual fue diseñado para reducir “interferencias” no deseadas en la conducción en el momento de máxima torsión, como por ejemplo las que se dan al acelerar de manera agresiva en superficies imperfectas.
Este efecto puede generar movimientos no esperados en el volante, lo que se acentúa en vehículos con neumáticos de medidas no convencionales y limitadores de resbalamiento. El sistema de frenos fue revisado para ponerse a tono con las nuevas solicitaciones.
El Focus RS debuta en la gran vidriera a la espera de sus selectos clientes. La historia de los RS le aventura el mejor desempeño dinámico, el éxito comercial de la familia Focus, el sustento donde desarrollarse: desde 1998, más de 5 millones de Ford Focus fueron producidos en Europa, incluyendo Rusia, con el auto siendo vendido en EE.UU. y Asia.