Audi AG inauguró el nuevo taller de pintura de la fábrica de Ingolstadt, en Alemania, donde trabajan unos 200 empleados -en tres turnos diarios- junto con 54 robots de pintura, 36 de operaciones y 8 de limpieza.
Presentado como uno de los más ecológicos del mundo, posee tecnologías de última generación: recirculación de aire, separación en seco y limpieza del aire de escape, sistemas que reducen 20% el consumo de energía de calefacción y agua por cada auto.
Puntualmente, el sistema de recirculación de aire permite bajar 30 por ciento las emisiones de CO2 por cada vehículo pintado en el nuevo taller. Por su parte, la limpieza del aire de escape disminuye un 90% las emisiones de compuestos orgánicos volátiles.
Otras de las claves del taller son las pistolas de pulverización de rotación electrostáticos de alta velocidad, que son completamente automáticas, así como el robot que controla a los autos pintados en más de 100 puntos de medición.
Además, cuenta con ayudas de elevación para el capot y el portón trasero (para simplificar la tarea a los empleados), y una cinta transportadora que se encarga de acercar los elementos a los empleados.
El proceso de pintura posee una duración de unas tres horas, tiempo en el que las carrocerías pasan por tres estaciones. En primer lugar se le aplica el material de carga, luego sigue la laca base y finalmente la pintura transparente.
En la actualidad, el flamante taller alemán de Audi AG realiza el trabajo de pintura a 650 carrocerías de automóviles por día, mientras que su capacidad máxima es de 900 vehículos diarios.