Audi está presente en el Salón del Automóvil de París con novedades para todos los gustos. Así lo demuestran sus dos showcar y los diferentes modelos de producción que expone.
Dentro del primer grupo, la marca presenta como primicia mundial el TT Sportback, un prototipo basado en la nueva generación del TT y con una carrocería de tres volúmenes con silueta de coupé.
Posee cinco puertas -sin marcos- y un interior compartido con el TT convencional, en el que se destaca la generosa pantalla -de 12,3 pulgadas- para el tablero de instrumentos y las salidas de aire que incluyen los comandos de la climatización.
La mecánica de este concept está conformada por un motor 2.0 con sistemas de inyección directa e indirecta, sobrealimentación y distribución variable, tecnología con la que se genera 400 caballos y 450 Nm de torque.
Este propulsor se combina con una transmisión automática S tronic (doble embrague) con siete velocidades y con la tracción integral permanente, con los que puede acelerar de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos.
Otra de las novedades de la marca en la muestra francesa es el flamante TT Roadster, es decir la variante cabriolet de la nueva generación del deportivo. Posee un habitáculo biplaza y una capota de lona que se acciona eléctricamente en 10 segundos y a velocidades de hasta 50 km/h. Mecánicamente, mantiene la gama del TT “cerrado”, que cuenta conmotores Diesel de 184 CV y nafteros con 230 y 310 caballos.
En París también se luce el prototipo RS5 TDI concept, con un potente motor Diesel con 385 caballos, junto con la renovada familiar A6, que incluye los modelos A6 Allroad y los deportivos S6 (450 CV) y RS6 (560 CV) en carrocerías sedán y Avant. También están los A7 y S7 Sportback y el RS7 Sportback (560 caballos), el más potente de la gama.
